sábado, 31 de enero de 2009

465 km de shuffle


Frecuentemente pongo el shuffle cuando me doy cuenta que llevo demasiados días escuchando las lo mismo en mi ipod, entonces aparecen canciones que no recordaba que tenía, muchas veces desarotunadas y otras que da gusto volver a oir. Oh, pero generalmente no estoy de humor para simplemente dejarlo correr, siempre adelanto y adelanto hasta encontrar algo que en ese momento se adecúe al mood.

Regresaba de un viaje que hice hasta el municipio de Mocorito, Sinaloa al final de este año; iba con mi padre en un autobús, el cual hizo casi 24 horas de recorrido hasta el D.F. Un poco más adelante de Mazatlán y con 1/5 de la bateria del ipod utilizada, decidí poner el shuffle. Todo lo que escuchaba me agradaba, así que no adelanté canciones (bueno una sí), en Acaponeta me decidí a mantener el shuffle hasta que se agotara la pila y anotar todas las canciones que oia cuando pasara por lugares que conociera su nombre, los checkpoints.

jueves, 8 de enero de 2009

Corrupción sincera

Nunca he tenido que sobornar a un funcionario público, pero por cultura general, sé que tienes que sugerirlo discretamente con expresiones como: No habrá otra forma de arreglarlo, no podría hacer como no pasó, ayudeme y yo lo ayudo, hagámoslo de la forma fácil, no sé.

Me gustaría muchísimo que hubiera quienes dijeran "señor, policía, no podría mejor sobornarlo y me deja ir" o "no, nada de que yo te ayudo y tú me ayudas, qué tal si mejor te corropo y omitimos el asunto" "oficial, por favor acepte mi soborno", "mire, podemos hacerlo por el camino difícil y el de la corrupción".